El mercado de futbolistas sub'23 está siendo peinado por el Cádiz en búsqueda de incorporaciones que puedan potenciar el poderío amarillo. La decisión de Julián de la Cuesta de continuar en el club, cierra de momento la opción de fichar a jugadores de más edad, salvo que se decida darle la baja a alguno de los que están actualmente en la plantilla. En el caso de sub'23 se tiene la plaza que dejó Acuña, que ocupa provisionalmente Ezequiel, al igual que se podría utilizar alguna de las otras de poco habituales.
Aunque no hay prioridades, es un secreto a voces la necesidad de reforzar la banda izquierda. Para esa posición ha aparecido en las últimas horas el nombre de Urko Arroyo. En las últimas horas Diario de Cádiz ya comentó el interés cadista, pero no hay sido hasta ayer cuando su representante, Mikel Mendizábal, ha hablado abiertamente de la posibilidad. El jugador de 21 años no está contando para el técnico del Bilbao Athlétic, Kike Liñero, y lleva algún tiempo buscando una salida. Mendizábal reconoce que "la opción del Cádiz es la que más nos gusta". Algo que argumenta: "Tenemos claro que donde más proyección puede conseguir el jugador es en un equipo como el amarillo, donde estoy convencido que no tendría problemas de adaptación. Hay más ofertas, pero por nuestra parte no va a haber problemas si llegan a un acuerdo con el Athlétic de Bilbao". Precisamente ese es el último obstáculo que separa al jugador del conjunto cadista. Arroyo cumple contrato el próximo 30 de junio con los vizcaínos, por lo que no se contempla a priori la opción de una cesión, sólo que le concedan la carta de libertad a cambio de negociar una cláusula de recompra para el futuro. El representante vasco confiesa que ya hay negociaciones entre ambas entidades: "Están hablando y está claro que la pelota está ahora en el tejado del club vasco. Nos han dicho que no van a poner trabas en una posible salida del jugador, pero también es normal después de tanto tiempo que se quieran reservar una opción para el futuro".
El futbolista ya conoce perfectamente lo que puede tener ante sí. El pasado verano formó parte del Athlétic de Bilbao que jugó el trofeo Ramón de Carranza, y quedó muy contento tanto con la afición como con el equipo amarillo. Ha estado durante toda su carrera deportiva en Lezama, e incluso ha llegado a jugar con el primer equipo a las órdenes de Javier Clemente en marzo de 2006, y en algunas ocasiones ha sido convocado por el sevillano Joaquín Caparrós.
"Jugar en el Cádiz le puede beneficiar"
Mientras el futbolista guarda silencio y se continúa entrenando con el Bilbao Athlétic, su representante Mikel Mendizábal confiesa que, aunque aún queda sentarse para terminar de aceptar todas las condiciones, le hace especialmente ilusión que el jugador vista de amarillo: "Conozco perfectamente esa zona y estoy convencido que jugar en el Cádiz es algo que le puede beneficiar. Puede convertirse en un gran futbolista tanto esta temporada como la próxima en Segunda A, y esperemos que pronto también en Primera".
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