La ausencia de un zurdo en el centro de la defensa ha puesto en más de un apuro a la zaga cadista en los últimos encuentros. La llegada de Juanma Delgado, que podría debutar mañana, libera a Dani Fragoso de esa posición, aunque busca acomodo en otra, ya que junto con Kiko Casilla es el futbolista más regular de esta temporada.
Durante la semana Javi Gracia ya ha probado con Fragoso en el doble pivote. El jugador está preparado para cambiar su rol en el campo: "Depende del entrenador. Estoy trabajando al máximo para que elija si ponerme de central o pivote. Me va a dar igual porque voy a dar lo mismo en el campo. Lo importante es jugar. No me desagrada en absoluto estar de mediocentro. He jugado muchos partidos y no me preocupa. No voy a ser egoísta. Es normal que siendo diestro me venga mejor jugar de central derecho que izquierdo, porque incluso los rivales lo saben e intentar presionar más. Sólo hay que centrarse en mejorar el juego sacando la pelota desde atrás", afirma.
El regreso a Granada le traerá viejos recuerdos. La pasada campaña en el 74, donde recaló del extinto Ciudad de Murcia, no tuvo final feliz. En el club de Marsá, casi todo ha cambiado: "Ya sólo quedan Valero y Curro Montoya del año pasado. El equipo es totalmente distinto, tanto la estructura como el club. Estoy contento de volver a Granada, porque le cogí mucho cariño a la ciudad durante la temporada que estuve. Será muy motivante". Además, será de ayuda a Javi Gracia porque conoce el campo de césped artificial de Pinos Puente: "Llegamos a entrenar varias veces en ese terreno de juego. Prefiero ese césped artificial a un césped natural en malas condiciones. Nos puede llegar a beneficiar si está mojado para poder jugar mejor la pelota. Es un campo normal, tiene buenas dimensiones, y podemos hacer nuestro fútbol. Cuando calentemos antes del partido veremos el bote del balón y nos aclimataremos".
En el vestuario la victoria ante el Roquetas, pese a que no fue con el fútbol deseado, ha servido para trabajar mejor: "El equipo está muy concentrado cara al domingo. Estamos deseando jugar. Es importante mejorar el juego y conseguir la victoria, es algo que podemos lograr porque durante la semana hemos trabajado a mucho ritmo. Tranquilidad no hay ninguna en el vestuario. Sabemos de la necesidad de los tres puntos, y que somos el líder de la categoría. Tenemos que llevar el peso del partido, aunque el juego no se esté viendo reflejado en los partidos. Los futbolistas somos conscientes que no podemos relajarnos, y el entrenador ha dejado claro que el que se duerma va al banquillo o la grada".
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