Apenas han tenido minutos durante esta temporada por uno u otro motivo. Los tres puestos de capitanes del equipo parecen haber estado gafados porque Fleurquin, Raúl López y De la Cuesta no están teniendo su año, aunque todo cambio es posible y aún queda casi media competición.
El que tiene más cerca su reaparición es el lateral jerezano. "Estoy deseando sentirme otra vez futbolista. Esta semana quiero ir con el equipo y si puedo jugar, mejor que mejor", asegura de manera contundente. La situación de Fleurquin es parecida, pero prefiere ser cauto: "A medida que ha ido pasando el tiempo me estoy sintiendo mejor. Sólo me queda coger el ritmo después de mucho tiempo sin poder exigirme al máximo. Mi regreso va a depender de las sensaciones que vaya teniendo y del propio entrenador. Si completo esta semana de trabajo será Víctor el que decida si me precisa".
Ambos tienen la suficiente experiencia en el Cádiz para saber lo que el equipo se trae entre manos. El capitán uruguayo cree que no se está haciendo justicia con el esfuerzo cadista: "Si uno ve los resultados y los separa de los partidos parece que el equipo está muy mal. En Córdoba el resultado debió ser de empate, y si alguien tuvo que ganar fue el Cádiz. Lamentablemente un gol tonto nos acabó condenando. Los errores se pagan caros en la categoría". Algo que Raúl López reafirma: "El equipo tiene una tónica de hacer buenos partidos, pero a raíz de encajar el primer gol se cambia de actitud y nos venimos abajo. Estamos creando ocasiones y llegando al área rival, pero el fútbol tiene estas cosas... Cuando se recibe un palo afecta psicológicamente".
Las actuaciones arbitrales tampoco están dejando a los capitanes buenas vibraciones. "Se comenta en el vestuario, pero no creo que los árbitros se equivoquen queriendo. Unas semanas dan y otras quitan. No debemos obsesionarnos, sino sólo centrarnos en nosotros para poder arrancar en los resultados. Es la única manera de ver los frutos del trabajo. Por muy buena imagen que se dé, sólo vale ganar, si no podemos llegar a un momento en el que lo veamos todo negativo y nos metamos en una mala dinámica. Es preferible no jugar tan bien pero sacar adelante los partidos", deja claro López.
Espina clavada con el Hércules
Los dos veteranos vivieron en sus carnes la caída al pozo del fútbol español y afirman tener cierto recelo al conjunto alicantino: "Si ganamos al Hércules podemos moralmente subir la autoestima. Fue el equipo que nos metió hace dos años en Segunda B cuando no se jugaban nada. Eso no lo olvido. En ese partido parecía que se jugaban la vida, y si juego tengo claro que voy a ir a muerte", dice Raúl López. Andrés Fleurquin prefiere ni pensar en el descenso de entonces: "Es muy difícil hacer comparaciones porque el entrenador y la plantilla son diferentes. No valdría la pena hacer una comparativa. Sí hay que romper la dinámica y salir de ahí abajo, porque conforme avanzan las jornadas cuesta más salir. Ante el Hércules tenemos una oportunidad de oro para ganar en casa y coger aire. Tenemos una espina clavada con ellos. Es mejor ni acordarse del partido del descenso. Nos ha servido para aprender".
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