Los 48 goles encajados por el Cádiz esta temporada lo capapultan a estar entre los peores de la categoría una jornada más. Cuando se suceden los resultados adversos y no se deja la portería a cero todas las miradas apuntan siempre hacia la misma posición: la portería.
Kiko Casilla pasó ante el Albacete su peor partido como cadista viendo como su estadio se le ponía en contra. Si a eso se le suma los cuatro goles que le marcó el Cartagena, no cabe duda que la merma psicológica para un guardameta es importante a todos los niveles. El tarraconense no se da por vencido y confía en que el equipo obtenga una reacción necesaria para mantener la categoría, aunque para eso tienen claro una cosa: "Nos falta hacer un partido completo".
Curiosamente el equipo cadista lo pasa peor cuando se pone por delante en el marcador: "Tenemos que aprender a aguantar los resultados. No se debió mover el marcador con el empate a uno". Le ha pasado en las últimas cuatro jornadas ante Hércules, Recreativo, Albacete y Cartagena. en todos ellos los amarillos se adelantaron con un gol inicial cuya renta no supieron aprovechar y se vieron remontados por los rivales. La historia se repite continuamente con 13 goles encajados en las últimas cuatro jornadas: "Es como casi todas las semanas. Enfada mucho a un portero encajar dos, tres, cuatro goles cada semana.. ¿La solución?. Que seamos capaces de imponer nuestro juego durante un partido completo, no sólo durante una parte". Ante el Rayo Vallecano ya no valdrán excusas.
"Nos vinimos abajo en Cartagena"
Lo sucedido en el estadio de Cartagonova va a seguir dando que hablar durante la semana. El propio Casilla se sorprende al analizar cómo perdió el equipo un partido que tenía completamente dominado: "Estuvimos muy bien en la primera parte defendiendo juntos y bien, pero la segunda parte del rival nos hizo venirnos abajo tras el gol que encajamos".
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