El partido ante el LInares pasará a la historia para dos futbolistas: Dani y Cifuentes. Ambos se enfundaron la camiseta amarilla por primera vez en partido liguero, y en los dos casos el técnico se mostró muy contento con el trabajo que realizaron.
En el caso del lateral izquierdo, no sólo defendió, sino también trazó algunas diagonales buscando la incorporación ofensiva de Enrique. El ex del Valladolid reconoce que "no se podía esperar más", porque se cumplió lo exigido: "El equipo jugó serio, mantuvo la portería a cero y ganó a un equipo que venía a complicar las cosas. Era lo que se nos pedía para el encuentro".
Para el guardameta Dani Miguélez era aún más especial. Hacía varios años que no se veía a un portero de la cantera defender la portería cadista: "Acabé muy contento y muy feliz. Fue un debut soñado. Intenté coger confianza desde el principio y acabé disfrutando en el campo con el público. Quien me conoce sabe que tengo un juego donde me gusta tocar la pelota en corto, en vez de dar el patadón arriba. El técnico me felicitó en el campo por el trabajo. Le tengo que agradecer a Javi Gracia y a Iñigo, el preparador de porteros, la confianza que están teniendo en mí".
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