Las dos últimas jornadas han dado al traste con los buenos números que el Cádiz acumulaba en el inicio liguero. Esas idóneas cifras para acabar la temporada como líder sí se cumplen en la delantera. Los amarillos están en el prestigioso grupo de los cuatro equipos máximos goleadores de Segunda B (Puertollano, San Fernando y Castilla) con 12 goles marcados. Todo lo contrario sucede con los goles encajados. Aunque el equipo comenzaba imbatido las dos primeras jornadas, en las dos últimas ha encajado seis goles -tres del Conquense y otros tantos del San Fernando-, eso le hace sumar siete goles encajados, los mismos que en la actualidad tiene el Roquetas, colista del grupo IV, y uno menos que los farolillos rojos de los otros grupos (Deportivo B, Pájara Playas y Atlético Baleares).
Un problema con fácil solución: extremar la concentración. Las miradas llevan centradas desde hace algunos días en los centrales Julián de la Cuesta y Dani Fragoso, este último hace autocrítica: "Es una cuestión de estar más atentos y concentrados en los primeros minutos. En Bahía Sur jugamos una primera parte desastrosa, de las peores que hemos jugado esta temporada. En el descanso hablamos de cambiar la mentalidad y se notó en la segunda. Hay que ponerse el mono de trabajo para estar contundentes atrás, si estamos así ganaremos muchos partidos".
Aunque parece una mera casualidad, el debacle defensivo ha llegado con la ausencia de Raúl López por lesión. En el partido ante el Conquense, gran parte del peligro vino por la banda izquierda que defendió Ezequiel, y en San Fernando sucedió lo propio con la presencia de David García, que no entiende lo que pudo suceder: "Fue una primera parte horrible mía, me llegó a dar vergüenza ajena por mi actuación. Pero en el descanso todos nos tranquilizamos y fuimos más contundentes".
La banda derecha cadista tampoco ha estado extinta de peligro en contra. La posición adelantada de Cristian también le ha jugado negativamente en labores defensivas. El catalán está convencido de que se corregirán los fallos: "Tenemos que hacer autocrítica de muchas cosas. No podemos encajar seis goles en dos partidos. Hay que corregir errores porque no podemos tener dos caras diferentes durante un partido, nos pasó con el Portuense, el Conquense y el San Fernando. Hay que madurar en esos aspectos para luchar por el campeonato".
Javier Gracia ya se ha puesto manos a la obra. El equipo, convencido de poder superar la mala racha defensiva, ha hecho piña en torno al partido del próximo domingo ante el Melilla para que todo quede en una mera anécdota.
Reaparece el fantasma del balón parado
Si en las últimas temporadas uno de los grandes lastres que ha arrastrado el Cádiz han sido los goles encajados a balón parado, en esta campaña también será algo a trabajar por el técnico Javier Gracia. De los siete tantos que los cadistas han encajado, tres han llegado desde lanzamientos de faltas laterales. Iturralde (Portuense), Javi Gómez (Conquense) y Casares (San Fernando) supieron sacar provecho de la indecisión defensiva para rematar a gol.
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