El empate a cero ante el Huesca del pasado sábado ha servido para sacar muchas conclusiones. En apenas tres días se ha comenzado a notar la mano de Víctor Espárrago en tres aspectos fundamentales: lucha, actitud y entrega. Pero todo es mejorable y los próximos entrenamientos de la mano del uruguayo deberán servir para dar el giro de timón que el equipo necesita para abandonar la zona peligrosa de la clasificación.
Tras la llegada de Bogunovic, que fue convocado pero no jugó por su baja forma física, esta semana va a ser clave para cerrar los refuerzos invernales del equipo. Aunque desde hace varias semanas se hablaba de un central y un mediocentro defensivo, parece que ahora las preferencias pueden cambiar. El presidente Antonio Muñoz ya ha adelantado que se está preparando la realización de un esfuerzo importante que también afectaría a la delantera: "Desde hace algunas semanas sabemos que vamos a intentar la búsqueda de un central, un mediocentro y un delantero. Víctor Espárrago esta semana tendrá que decidir las posiciones a reforzar. En las próximas horas nos reuniremos para que nos dé el visto bueno para reforzar esas posiciones. La intención es concretarlo cuanto antes", afirma.
Sobre el regreso de Espárrago al banquillo de Carranza, que fue recibido por una ovación de la grada cadista, Muñoz no se aventura a sacar conclusiones sobre lo sucedido por las condiciones del equipo: "Fueron muchos las bajas que condicionaron el partido. Se vio cosas como que el equipo controló el partido y no nos crearon ocasiones. No materializamos las ocasiones del principio del partido, y en la segunda parte el equipo mejoró presionando y yéndose arriba. Nos está faltando alguien que marque las ocasiones que se crean". Y ese alguien ya está en mente de la dirección deportiva.
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